
Crece el bajo rendimiento académico en adolescentes relacionado al consumo de sustancias.
Varios investigadores han confirmado que el consumo de sustancias entre adolescentes viene relacionado a un marcado descenso en su rendimiento académico.

Este descubrimiento, basado en un estudio exhaustivo arroja luz sobre los desafíos que enfrentan los estudiantes y destaca la necesidad urgente de abordar este problema creciente.
Los resultados del estudio muestran que aquellos estudiantes que participan regularmente en el consumo de sustancias, como alcohol, tabaco o drogas ilícitas, presentan un rendimiento académico notablemente inferior en comparación con aquellos que no se involucran en este tipo de comportamientos. Las calificaciones más bajas y la disminución de la participación en clase son aspectos destacados en este vínculo preocupante.
La comunidad educativa está respondiendo de manera proactiva ante este problema implementando programas de prevención y concientización para educar a los estudiantes sobre los riesgos asociados con el consumo de sustancias. Además, se están estableciendo protocolos para identificar y apoyar a aquellos estudiantes que puedan estar experimentando dificultades académicas debido a su participación en el consumo de sustancias.
"No solo estamos hablando de un problema de calificaciones; estamos hablando de la salud y el bienestar general de nuestros estudiantes. Debemos intervenir de manera efectiva para garantizar un ambiente educativo seguro y propicio para el aprendizaje" afirmó un director escolar.
Las familias desempeñan un papel fundamental en este esfuerzo, puesto que, la comunicación y la comprensión de los riesgos asociados con el consumo de sustancias son fundamentales para contrarrestar esta tendencia. Se espera que esta toma de conciencia colectiva conduzca a una acción coordinada para abordar los desafíos que enfrentan los adolescentes, no solo en términos académicos, sino también en su bienestar general.